Hay en este momento discriminación racial en Brasil?

Durante el siglo XIX, los países latinoamericanos comenzaron a romper con su pasado colonial y formaron estados independientes. Brasil no fue la excepción. Las élites intelectuales de America Latina preocupadas en sí mismas con la construcción de la unidad nacional. En estos proyectos de construcción nacional, los líderes nacionales tuvieron que lidiar con los eruditos europeos que denunciaron como degeneración racial debido a la amplia mezcla racial que existía y existe en las naciones emergentes.

Las oportunidades raciales en Brasil están mal distribuidas aun hoy en día, en el momento que la población blanca tiene una mayor ventaja y aceptación con respecto a las posibilidades de trabajo. El acceso de la población negra y mulata a la educación ha cambiado bastante esta visión negativa. Era y sigue siendo común escuchar por las calles brasileñas que los negros y mulatos son buenos únicamente para el futbol y la música.

Según los censos demográficos del siglo XXI, la mayoría de la población que se declara negra o mulata se encuentra principalmente en 8 de los 27 estados (Bahía, Sao Paulo, Minas Gerais, Rio de Janeiro, Pernambuco, Ceará, Maranhao y Pará). Según varias publicaciones del gobierno de Bahía, este estado ocupa el segundo lugar en el ranking de población autodeclarada “negra o mulata”, con un porcentaje total de 76,3% (17,1 de negros y 59,2% de mulatos) datos de noviembre de 2013

El término 'moreno' se utiliza para la auto-referencia como una características étnico-raciales, un eufemismo común y que niega características fenotípicas. Parece que es "políticamente correcto" hacer a los afrodescendientes como "morenos", una palabra fuertemente arraigada en la cultura brasileña.

Es un ejemplo de una situación que revela una estrategia simbólica de escape de una realidad en la que la discriminación prevalece. De esta manera, las personas buscan elementos de identificación de los símbolos del grupo considerado social y económicamente dominante, en este caso, el europeo blanco brasileño. El racismo brasileño está embebido de una fuerte asociación entre el color de la piel y una condición social esperada o deseada. Una correlación que actúa en los diversos momentos de la vida social, económica e institucional.

Esa complejidad quizás se puede ilustrar con el hecho de que muchos brasileños negros no piensan en sí mismos como negro. La estrella del fútbol brasileño Neymar es un gran ejemplo. Preguntado en una entrevista en 2010 si él había experimentado el racismo, su respuesta fue: "Nunca." Y añadió: "No dentro ni fuera de la cancha de fútbol. Aún más, porque no soy negro, ¿verdad? "

Esta negación de lo negro puede parecer confuso para muchos estadounidenses, porque a pesar de su larga cabellera, se alisa y, ocasionalmente,es rubio, Neymar es claramente negro (opinión personal). Pero para los brasileños, ser negro es muy diferente de lo que es en los Estados Unidos. "Claro, si consideramos la raza como una construcion social, debemos ver esta afirmación 'son negros' dentro de el contexto histórico estadounidense no dentro del brasileño". Quien esta en lo corecto? Dependera de quien responde la pregunta...

"Cuanto más oscura es una persona que vive en Brasil, más racismo él o ella va a sufrir. Los negros de piel clara no se identifican como negro en la mayor parte del tiempo ", dice Daniela Gomes, activista brasileña negra, que actualmente se encuentra cursando un doctorado en estudios de la diáspora africana en la Universidad de Texas. "Muchas personas optan por negar su negrura. Ellos no creen que son de color negro, pero sufren el racismo sin saber por qué ".

Gomes lo llama un "lavado de cerebro" que los brasileños viven en un país al que le gusta proyectarse a sí mismo como un modelo para la armonía racial. Pero también hace énfasis en las diferencias en las historias de los Estados Unidos y Brasil. "Nunca tuvimos la segregación, nunca tuvimos la regla de una gota, nunca tuvimos ese tipo de cosas que son tan normal para un afroamericano", dijo. "Lo que ocurrió en Brasil fue todo lo contrario."

La integración y el mestizaje eran en realidad la política del gobierno en Brasil. En la época en que los esclavos fueron liberados, en 1888, el gobierno trató de blanquear a su población a través de la importación de los inmigrantes europeos. Esta idea fue hecho ley por el Decreto 528 de 1890 y abrió las fronteras del país a los inmigrantes extranjeros, a excepción de los procedentes de África y Asia.

El objetivo de este esfuerzo de inmigración fue representado en una pintura de 1895 por el artista brasileño Modesto Brocos conocida como La Redención de Cam, que cuenta con una abuela negro, madre mestiza, padre blanco y blanco del bebé. La abuela se coloca a la izquierda con sus manos levantadas en la oración, alabando a Dios que su nieto es blanco. Esto, dice el empresario y activista brasileño Carlos Alberto David, es el "punto final" del racismo en Brasil.

"El racismo en Brasil es muy sofisticado y estructurado". "El racismo aquí no es físico. Funciona en personas psicológicamente ".

fuentes:
www.theroot.com
www.rebelion.org/
www.analisislatino.com/